Descubriendo Kioto: Santuario Kenkun-jinja

Muchos estudiantes, viajeros, trabajadores, investigadores y pasantes extranjeros vienen a Kioto para continuar con el siguiente paso de sus planes a lo largo de la vida. La principal razón por la que elijen a Kioto por encima de otras ciudades se debe principalmente a su atmósfera tranquila y riqueza histórica. Una gran parte de esto lo reflejan los más de 2.000 templos y santuarios en toda el área de la ciudad, y convenientemente algunos de los más importantes se encuentran ubicados cerca de SAKURA HOUSE KYOTO y sus opciones de casa compartida, dormitorio guest house y unidades privadas de alquiler vacacional. De todos estos, veremos en este Consejo Sakura uno al que se puede acceder fácilmente y disfrutar durante cualquier temporada. Se trata del Santuario Kenkun-jinja, también conocido como Santuario Takeisao-jinja.

Ubicado en la cima del monte Funaoka, el cual hemos mencionado anteriormente, se puede llegar a este santuario en solo unos 20 minutos a a pie desde nuestras opciones de alojamiento en Kioto, particularmente en el área central de Nishijin, el lugar de origen del la costura obi y kimono "Nishijin-ori" tradicional, aclamado a nivel mundial.

Aunque se encuentra en lo alto de este gran cerro, el camino es muy sencillo, incluso para senderistas inexpertos. La cima también tiene una hermosa área de descanso justo detrás de la ubicación del santuario con bancos para sentarse, una hermosa vista de la ciudad y también una vista de uno de los grandes caracteres del festival de “daimonji” que se encienden durante las festividades de Obon.

Kenkun-jinja consagra a Oda Nobunaga, el histórico señor de la guerra que contribuyó en gran medida a la unificación de Japón durante el período de los Reinos Combatientes. Fue construido alrededor del año 1869 y el santuario principal sirve como un hermoso ejemplo de la forma de construcción arquitectónica “nagare-zukuri”, donde el techo cuelga más sobre el frente de la estructura en su característico estilo inclinado. Esto le ha dado la reputación de convertirse en un bien cultural tangible de Japón.

En la entrada del área superior del santuario se ve fácilmente una gran roca con una escritura. Estos escritos muestran una sección de la obra de teatro favorita de Nobunaga “Atsumori”, y dice: “La vida de un hombre de 50 años bajo el cielo no es nada comparada con la edad de este mundo. La vida no es más que un sueño fugaz, una ilusión. ¿Hay algo que dure para siempre?”. Esta misma obra se representa parcialmente todos los años en el santuario el 19 de Octubre durante el festival Funaoka Taisai en recuerdo de Oda Nobunaga.

Curiosamente, después de la muerte de Nobunaga en 1582, se planeó originalmente construir un templo en la cima del monte Funaoka para consolar el espíritu de Nobunaga, pero la construcción se detuvo y la tierra se mantuvo como estaba durante varios cientos de años. Fue solo en 1869 que el emperador Meiji concedió la posibilidad de construir un santuario para adorar a esta figura histórica. Después de su finalización, el santuario ha recibido a visitantes con oraciones relacionadas con la ambición, la fortuna, el buen liderazgo empresarial y la protección contra desastres. El nombre original era Santuario Takeisao, sin embargo, más tarde se comenzó a conocer más como el Santuario Kenkun, que es una lectura alternativa a sus caracteres (建勲神社).

El salón de culto tiene una vara típica sintoísta “haraigushi” utilizada para la purificación durante los rituales. Los visitantes pueden usar esta vara para purificarse moviéndola hacia la izquierda, derecha, izquierda y por encima de ellos mientras mantienen pensamientos de agradecimiento.

Además de las festividades de Funaoka Taisai, se llevan a cabo otros eventos sintoístas durante todo el año, pero visitar el santuario en cualquier momento del año es una experiencia muy agradable. Se puede acceder mejor desde la entrada este a través de sus puertas torii en la base de la colina subiendo un conjunto de escaleras, o directamente a través de la escalera de entrada sur al monte Funaoka. Luego, una corta caminara permite ver la entrada del santuario con 2 grandes faroles y un juego de escaleras de piedra. La vista desde el santuario también es muy hermosa, ya que permite ver la ciudad de Kioto como si el santuario estuviera flotando en el aire. Dado que caminar por la colina es una prioridad, es fácil sentir la conexión indivisa con la naturaleza que caracteriza a la religión sintoísta. Esto también lo convierte en un hermoso paisaje en cualquier época del año, con hermosas flores en primavera, brisa refrescante en verano, follaje agradable en otoño y atmósfera mística nevada en invierno.

Desde todos los lugares alrededor de SAKURA HOUSE KYOTO, este es uno que siempre nos gusta recomendar a nuestros residentes. Así que la próxima vez que planee quedarse en Kioto para una estadía prolongada durante su programa de estudios de japonés o estudios universitarios, o una estadía breve por turismo o una pasantía breve, no dude en contactar a nuestro personal para ayudarte a encontrar la mejor opción para su estancia, como así también buenos consejos para disfrutar de su vida en la antigua capital de Japón.